Fabra quiere a Rus
fuera en el 2015
Agustín Ferrer Ortiz.-
“Fabra plantea a Génova que Rus
no debería repetir en el 2015 si mantiene sus pulsos”, Así de claro se ha
expresado el presidente de la Generalitat Valenciana Alberto Fabra en relación
a Alfonso Rus con quien mantiene una muy declarada y conocida enemistad por la
valentía y el coraje que demuestra el segundo frente a la inutilidad de un
hombre opaco y sin valores en política que no consigue nada positivo para la
Comunidad Valenciana y que fue colocado a dedo por Rajoy tras la salida de
Francisco Camps.
Alberto Fabra además de haber
sido colocado a dedo, no ha sabido ganarse la confianza ni de la propia gente
del PP, ni de los votantes, ni de los propios ciudadanos y este debería darse cuenta de que lo único
que está consiguiendo es llevar esta Comunitat a la ruina absoluta social y
políticamente hablando, ya que en la faceta económica el agujero fue culpa de
Camps y anteriormente de Zaplana, así que también echaremos la culpa a esa
herencia recibida, salvo que su falta de competitividad política y sus cortas
miras a futuro no le han permitido dar con las soluciones que la Comunidad
Valenciana necesitan y claro, es que no se puede gobernar la Generalitat como
si fuera el patio de sus casa o el ayuntamiento de Castellón.
Tiene toda la razón Alfonso Rus
al decir que “los valencianos no somos de rodilla en tierra”. Y precisamente el
carácter de Rus no es el de callar y agachar la cabeza. Es un hombre sin pelos
en la lengua, que no se anda con tapujos e incluso ha salido airoso en los
juicios por decirle a los rojillos de pacotilla las cosas tan claras como el
agua, ni tampoco se deja amedrentar por la bailarina pelotera que rodea a
Fabra; es decir, a Serafín Castellano a la sazón el mayor besa culos de la
historia de la política valenciana.
Génova tendrá que valorar las
consecuencias que tendría eliminar de la foto a Alfonso Rus, que además tiene
como aval no ser sólo francamente reconocido en toda la provincia de Valencia,
sino además tiene la ventaja de ser el único presidente de cualquier Diputación
Provincial en haber generado superávit en sus cuentas y que además tiene
contentos incluso a aquellos que son sus rivales directos de la oposición y de
los cavernícolas de la izquierda anarquista valenciana ya que su trato para con
todos los alcaldes, sean del color que sean, es de saber entregar en la justa
medida, todo aquello que necesitan para las mejoras de sus municipios y no creo
que el señor Rajoy se atreva a sacarlo del cartel popular, pues lo que si deben
tener muy claro por encima de todo es que muchos serán los votantes que dejen
de votar al Partido Popular y lo hagan a otras fuerzas emergentes en la derecha
moderada.
Con todo, otra de las bailarinas
fabristas que no mueve pie sin una orden lo ha dejado bastante claro al alegar
que “no hay nadie mejor posicionado –refiriéndose a Rus- para presidir la
Diputación”. Esto deja claro que Alberto Fabra no sabe donde tiene la mano
derecha ni donde la izquierda ya que José Císcar dice una cosa, mientras que
Serafín castellano anda diciendo otra, aunque de todos es sabido que las
relaciones personales y políticas de Castellano y Rus no han sido ni serán y
así lo han venido demostrando, nada cordiales, más bien de enfrentamientos y
cruce de miradas poco dadas al buen rollito.
Lo que ya no tengo tan claro, es
el juego de Génova. Las declaraciones de María Dolores de Cospedal alabando al
Molt Honorable President Alberto Fabra en las que alega que este tiene a todo
el PP con él denota que desde Madrid no conocen ni la mitad de la historia o no
les interesa conocerla, ya que para empezar las bases y los votante de este
partido no quieren ver al candidato ni en pintura y como dije más arriba, las
urnas dejaran constancia de las intenciones de los ciudadanos valencianos que
votan al Partido Popular con un voto de castigo que le hará muchísima pupa y
por desgracia regalando la Generalitat valenciana a un tripartito catalanista y
analfabeto sin principios políticos. ¿Un verdadero error de cálculo de Génova?
No, simplemente un desconocimiento total de la realidad valenciana.
Como dije, el Partido Popular en
la Comunitat Valenciana tiene un año por delante de muchas dificultades donde
las zancadillas y patadas desde Presidencia van a ser la tónica habitual como
viene haciendo dentro del Consell donde Fabra ha ido eliminando a los supuestos
corruptos para ir colocando sus peones y que nadie le pueda bailar las aguas,
pero las aguas se las van a bailar los ciudadanos ya que ven el Fabra un
político incompetente, sin una preparación necesaria para cumplir con las
necesidades de esta tierra, un hombre cabizbajo que duda a la hora de dar la
cara y cuya personalidad deja mucho que desear.
Alberto Fabra tiene de aquí a las
elecciones, un verdadero calvario.
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